No es un secreto que encontrar hoy en día, en nuestros televisores, programas de calidad y motivación para nuestras familias, es cada vez una tarea mas difícil.
La mayoria de los programas que encontramos son los denominados programas basura. Y estos, llegan a nosotros porque generalmente suelen ser fáciles de crear, baratos de producir y rápidos en alcanzar altos niveles de audiencia. (Vamos, la gallina de los huevos de oro de las televisiones).
Que yo recuerde, hemos podido sufrir los ataques de intento de privación de nuestro razonamiento e intelecto padecer desde hace varios años, diversos programas basura, cuyo formato lo único que buscaba es mantenernos delante del televisor a base de sacar a relucir lo «mejor» de nosotros: sensacionalismo barato, cotilleos, enemistades… (Léase: Gran Hermano, Operación Triunfo, El Bus, Fama, etc.).
Pero hay ocasiones en que, no se que planetas se alinearán con la tierra pero, puede llegar a darse el caso de que una sola persona, en su singularidad, sea capaz de cambiar a mejor, la dinámica y formato de un programa entero. Sin buscarlo, sin quererlo, simplemente por ser como es y aportar lo que tiene. Un ejemplo de esto en España fue Rosa en Operación Triunfo, estoy prácticamente seguro de que habríamos visto un OT negativamente distinto, si ella no hubiera estado presente en aquella primera temporada.
En Estados Unidos ha ocurrido algo parecido (más…)
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